COMO SURGE EL GÓTICO
La fecha de ese estilo se sitúa en el 1.137, siendo la primera manifestación la transformación del ábside de la Iglesia de Saint Denis en Francia, ciudad muy cerca de París, en cuya mencionada Iglesia se encuentra el panteón de los reyes franceses. Su inspirador fue el abad Surger, amigo de San Bernardo. Los templos góticos son instituidos al servicio del Espíritu y se aprovechan las manifestaciones energéticas que se amplifican en su interior. Las fuentes principales son la energía geotelúrica, la acústica y la lumínica, y se puede demostrar que hay una serie de patrones comunes, que identifican un tipo concreto de recintos, espacios y lugares que el hombre ha considerado sagrados o mágicos a lo largo de la historia.
Para eso hay que aclarar que se entiende por energía y se trata simplemente del principio que permite a la materia existir. Si vamos al mundo del átomo, vemos que todo lo que hay en el Universo está constituido por electrones que giran, protones que equilibran y neutrones que no conocemos muy bien. Por tanto la piedra, el vidrio o el agua, así como las células que componen el cuerpo del hombre tienen los mismos elementos, aunque en distintas proporciones, pero solo es posible en el hombre, su entendimiento.
La palabra magia, levanta ampollas en los racionalistas y hay que decir, que la razón no es capaz de aclararlo todo porque es un instrumento incompleto o que no sabemos manejar del todo. Siglos de ciencia, pensamiento, filosofía y especulación, han sido incapaces de presentar pruebas contundentes que demuestren creencias tan universalmente extendidas y aceptadas, como la existencia de Dios, que sigue siendo una cuestión de fe. Y hoy día, con los avances de la ciencia, los grandes científicos no han sido capaces aun de penetrar en los misteriosos comportamientos de algunas células. Nadie ve las radiaciones α, β, y γ (alfa, beta y gamma), ondas hertzianas que son patentes gracias a mecanismos como los receptores de radio, pero cuando se afirma que una piedra, lugar o árbol transmiten energía al ser humano, la negativa es la única respuesta. Todo cuanto existe está relacionado entre sí e influye en la salud, el presente y el futuro y afecta no solo al hombre sino a todos los seres y objetos que le rodean.
DEL ÚTERO DE LA MADRE TIERRA A LA CATEDRAL
Buscar un refugio, es algo que todos los animales han conseguido a lo largo de los tiempos. Tanto las arenas del desierto como las rocas polares, dan cobijo a diversos animales para conservar su energía, protegerse o cazar al acecho, cosa que también ocurre en las profundidades marinas. El hombre hizo lo mismo pero halló algo más, ya que con las distintas energías de origen telúrico presentes en el interior de aquellas cuevas, remedos del útero femenino, vivieron experiencias nuevas y distintas para otras especies y creyeron que esas fuerzas procedían de seres poderosos e invisibles, que las habían puesto allí para manifestarse. Por ello crearon en el interior de esas cuevas los primeros Santuarios donde habitaban sus dioses y podían relacionarse con ellos.
Así, aparecieron unos personajes que pretendían tener el poder para administrar esa energía y celebrar ritos para establecer una fuente entre dioses y hombres. Estos seres eran los intérpretes de las órdenes Divinas, llenándose esos espacios de representaciones de todo tipo. Las cavernas vibraban y vibran con las mismas energías que lo hacen las Catedrales, un ente vivo y dinámico.
DE LAS PIRÁMIDES A LAS CATEDRALES
Cuando se habla de las pirámides, sobre todo de las tres más conocidas de Keops, Kefren y Micerinos, el misterio sigue vivo, no se sabe como se construyeron ni para qué servían, pues a pesar de su aparente función funeraria, nadie está enterrado en su interior. El único vestigio que podría confirmar que es una tumba, es una especie de bañera, sarcófago o no, que se encuentra en la Cámara del Rey de la Gran Pirámide de Keops. Nadie sabe si allí se alojaron los restos de algún dignatario o faraón, ni se conoce como pudo trasladarse a ese lugar, porque su tamaño es mayor que las galerías y puertas que acceden a la cámara donde se encuentra. Se colocó allí cuando la fábrica lo permitía, incorporándola en el momento de su construcción o como polvo de roca y allí reconstruirla con técnicas hoy desconocidas.
Se pasó de las chozas de adobe a la aplicación de complejísimos conocimientos matemáticos y geométricos, que se ven confirmados por el uso del número Pi π (3´1416…) o el conocido número áureo Phi Φ (1.618) que confieren a sus edificios una armonía que está presente en todo lo sagrado, teniendo en cuenta que estos números no se describen hasta muchos años después, en la época de Pitágoras (siglo V a.C.). Este concepto es tan importante, que además no hay que olvidar que es el fundamento de toda la música occidental, desde los trenos funerarios (lamentos), pasando por el canto mozárabe hasta el rock duro, todo se rige por la aparición de éstos números. Phi y Pi son dos números irracionales. El primero es la base para calcular la proporción dorada o áurea y el segundo es la razón constante entre una circunferencia y su diámetro, y se representan con las letras griegas Φ y π.
Quienes concibieron esos monumentos, descubrieron sistemas científicos o mágicos, que hoy día se nos escapan, pero extrañamente fueron difundiéndose oralmente hasta llegar a la época de las Cruzadas en los siglos XI, XII y XIII. Entonces viajaron hasta Europa por medio de unos curiosos personajes llamados los Templarios. Los constructores medievales pues, tuvieron acceso a la Geometría Sagrada.
Por otro lado, las tumbas de faraones, nobles y sus templos, son lugares donde se celebraron ritos con cantos ceremoniales que se conservaron en el tiempo. Poco a poco fueron evolucionando hasta convertirse en cantos espirituales que conocemos como Gregorianos, que no es más que la adaptación de otras tres formas previas: El canto romano, el ambrosiano y la liturgia mozárabe. Lo primero que se aprecia en este tipo de manifestaciones acústicas, es la capacidad para inducir a un estado diferente de conciencia, por lo que los sacerdotes egipcios conscientes de ello, lo utilizaban tanto en el campo de la medicina como en el religioso. Las bóvedas y pasillos, fueron concebidos para aumentar la resonancia, reverberación y amplificación necesarias. Así que la Acústica Sacra, siempre ha estado relacionada con la construcción.
Durante el Imperio Nuevo (1.550-1.069 a.C.), fueron incorporándose a los ceremoniales algunos instrumentos musicales egipcios, como las arpas triangulares. Se cree que la gama de notas se elevaba hasta siete, que luego fue utilizado por Pitágoras para construir la teoría de las relaciones armónicas.
EL TEMPLO DE SALOMÓN
Salomón, hijo del rey David, recibió de su padre el mandato de construir el templo más grande que habría conocido el mundo hasta entonces, dedicado al Dios de Israel: Yahvé. Y decidió emprender la ardua tarea de edificar un espacio sagrado para que fuera habitado por el Santo de los Santos. Israel entonces, era un grupo de pastores nómadas sin conocimientos suficientes en materia de construcción, así que hubo de buscar apoyos en otra parte. Dios indica al rey en un sueño, que recibirá instrucciones reveladas por el profeta Natán y Salomón pacta con el faraón Saimón casarse con su hija, la cual va a vivir a Jerusalén con la condición de poder seguir haciendo el culto debido a su religión, por lo que la clase sacerdotal hebrea, los levitas, piensan que esto es un verdadero sacrilegio.
El compromiso incluye contar con los servicios del arquitecto Hiram-Abiff, que era además fundidor y experto en Geometría Sagrada. Él simula ser fenicio y toma el nombre de Hiram de Tiro, y son precisamente los fenicios quienes le proporcionan las maderas y metales para la gigantesca construcción y Balkis, reina de Saba, ordena el suministro a cambio de ganado y productos agrícolas.
Hiram organiza todo, con escuelas de obreros que luego se agrupan en gremios y a unos pocos, les da los secretos de la talla y el pulimento de la piedra, así como a construir la maquinaria necesaria. También establece un lenguaje profesional del que carecían los israelitas, que luego se transformaría en el código secreto de los constructores. Al frente de todo se sitúa Adoniran, hombre cercano a Salomón. Los trabajos duran siete años y luego se construye el palacio del rey, más los levitas miran con recelo a Salomón porque hay un nuevo orden social sobre el que tienen menos poder. Veamos las cifras:
3.300 capataces; 30.000 obreros; 70.000 cargadores y 80.000 canteros tallistas. De los elementos de fundición, los de mayor importancia simbólica son las dos columnas situadas a la entrada, llamadas Jaquin y Boaz y aquí es donde empiezan las leyendas.
Salomón, celoso de Hiram al que Balkis admiraba, incluso se dice lo amaba en secreto, hace contratar a tres traidores para que las columnas se quiebren, lo cual ocurre, para desprestigiarlo ante los ojos de la reina. Entonces dicen que a Hiram se le aparece un extraño ser, tocado con una mitra que portaba un martillo de herrero. Dice llamarse Tual Caín y lo conduce a un remoto lugar en el interior de su espíritu. Le indica que están en la casa de Enoc (Hermes y Esdras para los árabes) e Hiram recibe las instrucciones secretas de diferentes maestros primigenios. Después Hiram vuelve al mundo físico, reinicia la obra, pero ya Iniciado en la tradición Luciferina, acaba el trabajo con éxito.
Puerta y columnas del templo de Salomón
Todo esto, es claramente simbólico, ya que la Biblia explica que el primer intento de fundir las dos columnas se realiza sin ningún contratiempo, niega a Hiram su condición de constructor y de las enseñanzas diabólicas. La vida de Hiram termina en manos de asesinos pagados por los levitas y se le entierra en secreto, deshaciéndose así Salomón de su rival amoroso.
Para desentrañar ésta cuestión es necesario ir más atrás, cuando Moisés liberó a su pueblo y los llevó al desierto supuestamente cuarenta años (cosa que la arqueología bíblica niega y que veremos en otro trabajo). El faraón los dejó marchar asustado por las plagas, pero luego los persiguió, ¿por qué ese cambio? ¿se había llevado algo que no convenía y había que recuperar?. Aunque el Antiguo Testamento no lo expresa, lo que Moisés arrebató fueron los secretos en materia de construcción y éstos fueron depositados en un objeto sagrado donde quedaron protegidos: El Arca del Pacto o de la Alianza. Salomón lo sabía y no dudó en emplearlos para la Casa de Dios. Todo esto está plagado de misterios, añadiéndose la presencia de otros objetos míticos como el llamado Mar de Bronce o la Mesa, tan buscada a través de los tiempos.
Pero lo importante aquí, es la conexión entre el templo de los templos y la construcción de Catedrales, ya que éstas se construyeron siguiendo los mismos conocimientos que hicieron posible el primero y la intemporalidad de tales saberes, no fueron de los sabios de la época, sino de las instrucciones de Dios a Natán y los secretos robados por Moisés, hasta que fueron descubiertos en época de las Cruzadas por los Templarios.
Se ha resaltado la relación de éstos con la Masonería, pero se olvida a un personaje importante al que se confió la custodia de aquel templo y posteriormente se convirtió en el espíritu protector de las Catedrales góticas: El diablo Asmodeo, el guardián de los secretos. Este era el encargado de enseñar astronomía y matemáticas en el Infierno y el Talmud lo presenta como Príncipe de los demonios, mano derecha de Lucifer. La leyenda cuenta que fue capturado por Salomón y obligado ayudarle a construir el templo y se le representa con cola de serpiente. Puede verse profusamente en la decoración de todas las Catedrales góticas, donde los demonios se consideran protectores del espacio sagrado. Asmodeo, es una especie de intermediario entre las fuerzas del bien y el mal. 
Imagen de Asmodeo en la Pila del Agua Bendita en Rennes le Château (Francia)
(continuará)
Todos los derechos reservados Copy Right 2008 Orden del Temple