Camarín de Nuestra Señora

Esta maravilla del barroco, tiene forma de cruz griega. Sobre la cornisa que recorre el recinto, se eleva la bóveda en forma de concha invertida, con relieves de distintas figuras. Hay un hermoso lucernario de más de 20 metros de altura. Los pavimentos y zócalos son de variados jaspes y mármoles

La construcción, obra del Maestro Rodríguez que la terminó en 1.696 después de ocho años de intenso trabajo. El decorado, fue completado sobre 1.736 al 39. En las oquedades de los pilares, hay hornacinas separadas por escudos, con estatuas barrocas de María la Profetisa, Débora, Jael, Sara, Ruth, Abigail, Esther y Judit.

En el testero de los ábsides, decoran el recinto nueve espléndidos lienzos, pintados por Lucas Jordán por encargo del rey Carlos II. Evocan escenas de la vida de la Virgen María.




Parte posterior del Trono

Nuestra Señora de Guadalupe

Esta imagen, es una talla de madera de cedro, de estilo románico, del siglo XI o XII.

Su rostro, de una gran belleza, gran majestad y austera serenidad, sin llegar a ser negro es oscuro, más que moreno. Ciñe en sus sienes una corona imperial, empuña en Su mano un cetro y sostiene en Su regazo al Niño. La escultura es sedente, aunque aparece vestida desde el siglo XIV, como consta en un inventario de 1.389. Preside el Camarín, en un trono levantado en 1.953, al conmemorarse el 25 aniversario de Su coronación canónica.


Este trono de plata sobredorada, recoge en diversos cuadros los misterios del Rosario, las alegrías de la Virgen y los momentos más importantes de la vida del Monasterio.

Ricos mármoles y lujosa decoración embellecen el recinto, custodiado en dos capillas laterales por San Joaquín y Santa Ana.

Contemplar la imagen de la Virgen de Guadalupe, es vivir la historia de España que se ha postrado ante Su trono; es percibir el descubrimiento de América bajo el signo de Su cetro. Hoy, multitud de devotos y turistas se suceden en las visitas a Nuestra Señora, y salen de Su Camarín con el alma cargada de recuerdos y emociones. Simplemente la fe, puede captar este encuentro de Amor, esperanza y oración confiada.

La Sacristía

Esta suntuosa sala, proclamada “reina de las sacristías de España”, es la medida del equilibrio, el dominio de la armonía y la perfección de la elegancia. Fue edificada desde 1.636 al 1.645, según los planos del arquitecto que era carmelita descalzo. La portada muestra una exquisita perfección en sus jambas, dinteles, cornisas y frontis de jaspes pulimentados.

La nave, de planta rectangular, se divide en cinco bóvedas de medio punto, cuyos arcos se apean sobre pilastras de origen toscazo. Está decorada con guirnaldas de flores y frutas de estilo pompeyano. En las bóvedas hay cuadros al fresco representando escenas de San Jerónimo, obras de Manuel Ruíz. El mobiliario destaca por su sencillez y hermosura, con unas cajoneras de granadillo y nogal. La estancia tiene una suntuosa pinacoteca, con lienzos de Zurbarán que la llenan de luz y color, con aromas de plegaria, de amor y de fe. Se nos transmite al alma la emoción de estos cuadros, perfectos y geniales en su técnica, ya que el artista vivió en Guadalupe la santidad de sus frailes, la aventura de la mística y el encuentro de Dios en la vida de los santos. Entre luces y sombras, entre gozos de amor y angustias de espíritu, captó la andadura de estos hombres en los caminos de Dios.


Sacristía


Las Tentaciones

La Misa

Reflexionemos sobre los lienzos. Como decimos, son una obra maestra de Zurbarán y nos muestra a los monjes, sus virtudes, que nos adoctrinan con su ejemplo. En el inmediatamente superior, vemos a Fr. Pedro de Cabañuelas, en éxtasis, que adora y acata la presencia de Cristo en la Eucaristía. En otros de la sala, vemos a Fr. Andrés de Salmerón que transparenta las tempestades del alma vencidas por la mano del Cristo; situaciones difíciles de la vida humana, tristezas de los males del mundo, la caridad con los hambrientos, y la serenidad ante la muerte que nos lleva a Dios.

La sacristía con la capilla, mide 28 metros de largo, 7.50 de ancho y 12 de alto.

(continuará)


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