Dijo Jesús: “Yo Soy el Buen Pastor, que es el que da la vida por las ovejas; el asalariado, que no es pastor ni dueño de las ovejas, ve venir al lobo, las abandona y huye; el lobo hace estragos y las dispersa y es que a un asalariado no le importan las ovejas. Yo Soy el Buen Pastor, que conozco a las mías y las mías me conocen, igual que el Padre me conoce y Yo conozco al Padre: Yo doy mi vida por las ovejas y tengo además otras que no son de este redil; también a éstas las tengo que traer y escucharán mi voz y habrá un solo rebaño y un solo Pastor. Por eso me ama el Padre, porque Yo entrego mi vida para poder recuperarla. Nadie me la quita sino que Yo la entrego libremente, porque tengo poder para entregarla y poder para recuperarla. Este mandato lo he recibido de mi Padre”.
(Juan10, 11-18)

Meditación

Señor, Tú eres mi Pastor, el que dio Su vida libremente para que yo tenga Vida. Tú me conoces mejor que yo mismo y yo quiero conocerte cada día más y gozar de Tu presencia.

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