AUTORA: Soror J.G.++    
No se mide según con quien sales, ni con el
número de personas con quien has salido ni conoces.
No se mide por la fama de tu familia, ni por
el dinero que tienes, ni por la marca de coche que conduces, ni por el lugar
donde estudias, ni por el puesto de trabajo que tienes.
No se mide ni por lo guapo, ni por lo feo que
eres, ni por la ropa que llevas, ni por los zapatos que calzas.
La vida simplemente es ….. Otra cosa.
LA
VIDA: La vida se mide según a quien amas y según a quien
dañas.
Se mide, según la felicidad o la tristeza que
proporcionas a otros.
Se mide, por los compromisos que cumples y
las confianzas que traicionas.
Se mide, por el sabor de boca que dejas a los
demás con tu presencia y con tus comentarios.
Se trata de lo que se dices, y lo que se
hace, y lo que se quiere decir o hacer, ya sea dañino o beneficioso.
Se trata de la felicidad que seas capaz de
soportar, de admitir, de querer sinceramente ser feliz.
Se trata de a quien no le haces caso por
negligencia olvido o descuido, o a quien ignoras intencionadamente porque sea
una persona toxica, o porque tenga algo que aprender.
Se trata de los juicios que formulas, y a
quien o contra quien los comentas.
Se trata de los celos, del miedo, de la ignorancia
y de la venganza.
Se trata del odio, el respeto o el amor que
llevas dentro de ti, de cómo lo cultivas y de cómo lo cuidas.
Tú y solo tú escoges la manera en que vas a
aceptar a otros; y de esas decisiones, ES, de lo que se trata la vida
Hacer un amigo es fácil, pero la vida habla
de ti por aquellos amigos que fielmente supiste conservar.
Por aquellos a los que te supiste entregar
sin exigencias.
Al fin y al cabo todos estamos de visita en
este momento y lugar; sólo estamos de paso, hemos venido a este mundo a
observar, aprender, crecer, amar, evolucionar y volver a casa.
Buda dijo que uno de los secretos de la vida
está, en no lamentarse por el pasado, preocuparse por el futuro, ni adelantarse
a los problemas, sino vivir sabia y seriamente el ahora.
El sabio no se sienta para lamentarse sino
que se pone alegremente a su tarea de reparar el daño que haya hecho; cómo se
dice en nuestra Orden “Lo bueno arrasa con lo malo que hicimos”.
Además el Dios en quien yo creo, no nos manda
el problema sino la fuerza para sobrellevarlo o resolverlo, y nosotros tenemos
que ser capaces de esparcir e irradiar esa fuerza con optimismo y alegría. 
El mensaje de Cristo fue muy claro: “Amáos
los unos a los otros como Yo os he amado”
Enseñémonos a amar, y amar implica perdón,
bondad, fortaleza,paciencia,generosidad,firmeza, templanza……y, sobre todo…..
humildad.
Así que, así se mide la vida.
Y la vida será contigo tan justa como tú lo
seas con los demás.

Non Nobis

Orden del Temple+++