Templo Oración

En el Templo de Oración, Luz, Paz y Energía, los hermanos de la Orden del Temple oran para ayudar a todo aquel que lo solicite ante cualquier situación personal y/o colectiva.

Donaciones

Como Organización sin ánimo de lucro y de base religiosa, aceptamos donaciones que puedan hacer que nuestra labor continúe diariamente al servicio del Cristo.
(En muchos países este tipo de donaciones tienen deducciones fiscales).

Información Usuario

IP Address
54.225.35.224
United States United States
Explorador
Unknown Unknown
Sistema Operativo
Unknown Unknown

Su Hora

Música

module by Inspiration
Sendero Del Grial. Mayo 2.012
Publicaciones Orden del Temple - Senderos
Escrito por María de Aquitania   
Miércoles, 02 de Mayo de 2012 00:00

El Cristo es nuestro sendero

Todo lo recibimos a través de Él y todo lo podeos hacer por Él. Cristo dijo: “Lo que Yo hago, y cosas más grandes podréis hacer vosotros”. Ello es totalmente cierto, pero si podemos hacer cosas extraordinarias es gracias a Él, a Su fuerza, porque por nosotros mismos, no podemos nada.

El Cristo es la llave de la Puerta de la Vida, Vida que también es Él: “Yo Soy la Vía, la Verdad y la Vida”. Tenemos que aprender a  utilizar correctamente la Llave del Espíritu, para poder abrir la puerta del Santuario de Dios. Su uso justo depende únicamente de nuestra voluntad, nuestro valor, y nuestra disposición al sacrificio.

Construir nuestro Templo Interno

Esta meta es para nosotros irrenunciable y urgente si pretendemos ser discípulos o soldados del Cristo, o simplemente cristianos, porque “el que no tiene el Espíritu del Cristo, no le pertenece”, dice Pablo con justa razón. Y el Espíritu del Cristo  no puede estar en nosotros si no hemos construido un auténtico Santuario Interno, pues Su presencia, es incompatible con la impureza, el orgullo, la desarmonía, el odio, el rencor, el egocentrismo, con deseos, pensamientos y actos negativos, etc. Así pues, el primer paso consiste en determinar quienes somos realmente nosotros.

El autorreconocimiento y el arreglo previo

Hagamos primero un exámen exhaustivo  de nuestra propia situación. Reconozcamos sinceramente nuestros fallos, defectos, vicios y carencias de todo tipo. Sin esto, no sabremos sobre que terreno construimos y el primer soplo de viento, acabará con nuestra tentativa de edificación. Hemos de reconocer que tenemos poco de bueno y mucho de malo, y eso debe hacer nacer en nosotros un sentimiento de HUMILDAD, que debe servirnos de base al edificio. San Bernardo nos lo dice: “Si no se levanta sobre el fundamento de la humildad, el edificio espiritual no puede mantenerse en modo alguno”. Esta ha de ser la primera medida a tomar, la toma de conciencia de nuestra humildad y la firme decisión de cambiar nuestra situación interna: Eliminar los fallos, corregir los defectos, transformar los vicios en virtudes, nivelar, aplanar y armonizar el terreno de nuestra alma.

La estructura de nuestro Templo Interno

Este, se levantará por medio de una nueva forma de pensar. Edificaremos en la medida que mantengamos siempre un pensamiento positivo, que veamos siempre lo bueno en las personas y en las cosas, y por consiguiente, rechacemos sistemáticamente todo pensamiento negativo, no emitamos ningún juicio o crítica negativos, ni tengamos malos pensamientos contra nada o contra nadie.

Debe ser evidente para nosotros, que sólo lo positivo construye mientras que lo negativo destruye. La construcción de nuestro Templo espiritual, exige en todo momento en nosotros, pensamientos nobles y elevados que atraen sobre nosotros efectos positivos. Un mero descuido en el control de nuestros pensamientos y sentimientos, puede arruinar nuestra labor de edificación espiritual y obligarnos a empezar de nuevo.

(continuará)

Copyright. Todos los derechos reservados. Orden del Temple

 
USER MENU